Versículo:
“Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.”
— Salmo 46:10 (RVR1960)
Reflexión:
A menudo queremos respuestas rápidas, soluciones inmediatas y caminos claros. Pero Dios obra en Su tiempo perfecto, no en el nuestro. Estar quietos no significa ser pasivos, sino confiar en que Él está obrando incluso cuando no lo vemos. A veces, el silencio de Dios es parte del proceso para fortalecernos, enseñarnos paciencia y profundizar nuestra fe.
Oración:
Señor, ayúdame a confiar en Ti incluso cuando no entiendo el camino. Enséñame a estar quieto y a reconocer que Tú estás en control. Dame paz mientras espero y obediencia mientras camino por fe.
Desafío del día:
Tómate cinco minutos hoy para estar en silencio delante de Dios. Sin música, sin peticiones. Solo escucha.